Párrafo 12.23
12.23 «A los treinta y cinco llega la edad mecánica, hay que buscar en cada momento la diferencia dentro de la apariencia de igualdad, un proceso difícil y apasionante que despierta el estado de alerta».
COMENTARIO DE EL AVENTURERO
Del estudio del movimiento de los cuerpos es de lo que se ocupa la mecánica y lo mecánico es aquello que, una vez puesto en marcha, ejecuta y mantiene las acciones de una máquina. Mecánico es, también, eso que se hace sin reflexión, sin alma.
El Universo, la realidad, es una gigantesca máquina.Y, aunque no lo sea, hay que explicarlo como si lo fuera, como una sucesión encadenada de causas y efectos. Esta es la esencia del mecanicismo.
Una explicación en la que lo físico y lo real llegan a ser la misma cosa. Cuerpos que se desplazan y giran respecto y en torno a otros. Como los engranajes, el resorte, el volante, el áncora y las demás piezas de un reloj. Una explicación basada en regularidades, en la aplicación de las mismas leyes según cada circunstancia. Todo está escrito en las fórmulas de la Física.
Y sin embargo, parece contradictorio hablar de repetición en un mundo que cambia continuamente. El movimiento, el devenir, es la esencia del espaciotiempo. No puede entenderse si no es como un proceso. El proceso mediante el que ser se hace o llega a ser.
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6 Comentarios
Loli
19 abril, 2017Cuando, a veces más allá de ese múltiplo de siete que son los treinta y cinco, se empieza a intuir que gran parte de la personalidad, de la manera de relacionarnos con los demás, de afrontar y de huir de compromisos, de asumir o rechazar posibles hazañas, lo ha ejercido, en realidad, un esquema mecanicista, dibujado en determinadas áreas de nuestra corteza cerebral, y que inclusive las posturas que adoptamos, literalmente, relacionadas con nuestra columna cervical, con las partes más mineralizadas de nuestro organismo, corresponden a esquemas repetidos, recurrentemente adiestrados, ¿cómo empezar a digerir que la mayor parte del tiempo una especie de «mecano» impostor, pero que a la vez es uno mismo, ha estado viviendo por ti?.
Alicia
20 abril, 2017¿Pero y si en el empeño de huir del mecanicismo lo que se termina por mecanizar es la forma de combatirlo?
O, de otra manera, ¿cómo se puede tener la seguridad de, al pretender no caer en el mecanicismo, no estar utilizando al propio mecanicismo como “arma” defensiva?
A fin de cuentas el impulso natural y primario del ser humano es recurrir, ante cualquier situación, a soluciones que conoce. Que no digo yo que no esté bien el aplicarse a buscar soluciones nuevas. Pero no serán nuevas si en la búsqueda se utilizan los criterios viejos que de forma mecánica están amarrados al «yo», aunque no nos demos cuenta.
Loli
21 abril, 2017Efectivamente Alicia, y ahí debe consistir el verdadero trabajo que nos permita crecer.
Ir reconociendo y «des-trabando» lo que se empeña en seguir siendo el «perfil» que nos hemos creado de nosotros mismos, y en ir descubriendo lo que el empeño en mantenerse y usurpar de esa «supuesta personalidad nuestra», quiere impedir que se manifieste.
Y siendo conscientes…que para mí es lo más duro y tremendo…., de que esa resistencia, en sus múltiples manifestaciones, proviene de nosotros mismos.
Memoria, Entendimiento y Voluntad, son las tres herramientas que nos ofrece el alma.
Valentía….igual es la cualidad que hemos de buscar, si queremos enfrentarnos a nuestra propia máscara.
Alicia
21 abril, 2017No, Loli, si de acuerdo estamos. El intríngulis creo que reside en cómo estar seguros de que al enfrentarnos a la máscara no la estamos mirando con los ojos de la máscara. Pienso que nadie tenemos la subjetividad suficiente para reconocer, no ante los otros si no ante nosotros mismos, nuestra verdad y nuestra «mentira enmascarada».
Loli
21 abril, 2017Sí Alicia, si eso creo que es lo que yo te he entendido.
Quizás en lo que yo no me he explicado bien, es que creo que ese trabajo de ir discerniendo cuando estamos empleando nuestras propias «trampas», y cuándo no es así, y empieza a asomar actitudes más esenciales, auténticas, nuevas….es, en principio, lo que podemos o debemos ir abordando.
Ser consciente de la subjetividad de estos pasos, ya es importante, el resto requiere una actitud de atención, de alerta…o al menos, de sentirnos menos a gusto en estados adormecidos, eso ya son comienzos, me parece.
Rafa
22 abril, 2017En la Cábala, se contempla también la vida marcada por los septenios, pero además cada tres ciclos, vienen simbologizados por las distintas fases del día, distinguiendo mañana, mediodia y tarde.
Por tanto de (0 a 7) años correspondería a la mañana, de (7 a 14) el mediodía, de (14 a 21), la tarde.
A la edad de 35 años, le correspondería el mediodía, y que significaría esto?.
El mediodía, simboliza la dualidad, lo que separa y lo que une, el fruto y la semilla, lo que se siente y lo que se piensa, es el material que permite edificar.
Nos permite identificar, que la la risa y el llanto, no están tan separados.
En un tiempo en que la vida media de una persona era aproximadamente de 70 años, los 35, serían la mitad de la vida.
En este momento empieza a predominar la faceta de dar, damos al mundo lo que hemos recibido.
En la mitad de la vida aproximadamente, ya deberíamos empezar a plantearnos que lo importante, no es lo que los demás piensen de nosotros, sino lo que yo pienso de mí.
Ya vamos dejando de valorarnos a través de los otros y lo hacemos a través de nosotros mismos.
Además, es un momento en que mueren tantas células, como las que nacen en nuestro organismo, por lo que básicaménte, la transmisión de la información celular debe parecernos mecánica.
En definitiva, es la época en que se comienzan a perder ciertas capacidades, empezamos a ver y oir peor, pero comenzamos a desarrollar otras, por ejemplo, la capacidad de escucharnos a nosotros mismos.
Un abrazo