Párrafo 14.2
14.2 «Representaciones simbólico-mágicas de aspectos divinos ligados a la necesidad del momento han sembrado la tierra a lo largo de milenios; y ello sólo es la punta de iceberg, lo mínimo que físicamente se ha conservado, de lo que todos los hombres de todos los pueblos de la Tierra han ido atesorando y lanzando al plano arquetípico de lo colectivo. El arte es pues, uno de los aspectos que definen la consciencia humana, una chispa que prende en la misma llama la razón, la intuición y la iluminación».
COMENTARIO DE EL AVENTURERO
Puede deducirse de estas palabras que el arte surge del intento de aproximación del hombre a la comprensión de las cualidades de lo divino, o mejor dicho, de la necesidad ontológica del ser humano de dejar constancia material, pero también intuitiva, simbólica y etérea, de dichos intentos de reconocimiento y comprensión de lo divino, asumiendo en el mismo intento que todas las posibles representaciones, tanto visuales como sonoras o gestuales, son inevitablemente reduccionistas, parciales y limitadas.
La generosidad del ser humano de desear compartir todo encuentro íntimo y personal con lo trascendente, por pequeño y breve que sea, buscando la forma de transmitirlo al resto de sus congéneres, es uno de los rasgos más destacables del hecho artístico, y uno de los atributos más valiosos del género humano. Además, afortunadamente, este intento de transmisión nunca cae en saco roto, pues, como dice el texto, se atesora en el plano arquetípico de lo colectivo, al que toda persona con inquietudes de búsqueda espiritual puede acceder. Así visto, el Arte es una de las más importantes herramientas evolutivas de las que disponemos.
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3 Comentarios
loli
27 marzo, 2018El título de “Patrimonio de la Humanidad” va ligado, quizás, a un reconocimiento, o intento del mismo, de ese valor “arquetípico” que navega en la expresión artística, y que casi intuitivamente se manifiesta como lo que el texto refleja: el atesoramiento en un plano colectivo de lo conseguido por la Humanidad, en su trabajo de acercamiento a lo trascendente, a lo divino.
Esto, casi siempre se olvida, y la mayoría de las veces, las manifestaciones artísticas, de todo orden, (incluyo el folklore en ello), son utilizadas como elementos que intentan afianzar y engrosar “los egos de los pueblos”, cuando eso parece imposible.
Y entiendo, ahora, que esa apropiación no se pueda dar, porque, realmente, toda manifestación en ese orden, como en muchos otros, pero en el Arte es evidente, proviene de esos elementos arquetípicos, lanzados, desde la inconsciencia muchas veces, y seguramente, otras, desde niveles conscientes más elevados, a un espacio común del que la Humanidad puede beber.
Elementos que, como hologramas, son una parte de “la imagen” completa, y que funcionan como tales, portando en ellos las posiblidades de recrear la forma que los originó.
Nunca, a pesar de que es algo con que todas las ciencias ya cuentan con ello, nos planteamos que todo aquello a lo que tenemos acceso desde la percepción de nuestros sentidos, son partes de “unos todos”, con los que tejemos la descripción de lo que creemos ser, saber o conocer.
No es difícil caer en la cuenta, que todo lo que hemos definido como identidad, tanto individual como colectivamente, está compuesto y cultivado desde parcelas de realidades mucho más amplias, en la que la Humanidad entera y su Historia está incluida.
Simplemente con “liberar” una actitud de ignorancia hacia lo que creemos poseer, las raíces que creemos nos pertenecen por el hecho de haber nacido en algún sitio determinado, contemplar la realidad de que esas mismas raíces se extienden y cruzan, y comparten y compartieron sus riquezas de múltiples formas, hasta llegar a formar parte de lo que creemos “nuestro” y “autóctono”, solo con eso, ¿cuántos pensamientos, centrados y adocenados, se liberarían, también en nosotros?
Rafa
28 marzo, 2018Para C. G. Jung la mente humana tiene su propia historia y la psique conserva muchos rastros de las anteriores etapas del consciente, podemos desdeñar esos contenidos, pero inconscientemente respondemos a ellos y a las formas simbólicas con que se expresan.
En el mundo del arte estas imágenes arquetípicas son fundamentales, correspondiéndose psique que conserva y transmite la común herencia psicológica de la humanidad. Esos símbolos son tan antiguos y desconocidos que nuestro objetivo es descubrirlos para entender mejor la obra plástica.
El arte es un catalizador para entender la esencia más profunda del individuo, sobre todo moderno, porque ha perdido casi todo el contacto con los símbolos.
Para Jung, por ejemplo la figura del heroe, es un arquetipo, pero hemos visto cientos de esculturas griegas y romanas, en las que la simbología del heroe esta presente, porque para estos, los mitos forman parte de su espiritualidad, y el heroe, forma parte de ese inconsciente, y se refleja a través del arte.
Podriamos decir, algo semejante con la imaginería de las vírgenes en España, la virgen en este caso entronca con la representacion del símbolo de diosas como Estarte, Venus, La Estella Maris, que han sido objeto de culto desde practicamente el hombre del neolítico
Un abrazo
ariguariguaripopoomushuringa
30 marzo, 2018Estimo que éste haber arribado a la página 191 del libro madre, y a su punto 14.2, significa no sólo un largo tiempo transcurrido, sino una abundante y meditada participación en el comentario personalista con intenciones geneneralistas de, al menos, unos pocos continuadores de largo aliento, que estimo, en tan largo periplo, deben haber alcanzado una cierta claridad interpretativa. La sección aborda muy bien esa necesaria presencia desde el origen de la representación y sensibilización artística. Lo gráfico resume lo consciente e inconsciente, y en esa misma representación se adivina que el entendimiento junto a la vivencia es certero. Esforzarse en la representación plástica, ideograma, trazo, síntesis, no sólo explicita una buena coordinación pensante/sensitiva sino el aliento del espíritu global.